Coaching: Es un proceso, en el que la meta es
conseguir la mejor versión de uno mismo. Por lo tanto el proceso nunca se da
por terminado, pero conforme se avanza, llega un momento en que cada uno es su
propio Coach.
Hay diferentes escuelas y diferentes
corrientes pero todas llevan a conseguir la mayor felicidad posible.
Da igual por donde comiences, por coaching
personal, familiar, de empresa porque el cambio va repercutiendo en el resto de
ámbitos.
En general, ayuda a desarrollar habilidades, a
detectar problemas de desempeño, fomenta las relaciones productivas, estimula
el cuidado de uno mismo, mejora la actitud etc.
Llegaremos a la autoconsciencia y a la
autoconfianza.
A hablar en primera persona y
responsabilizarnos.
Se trabaja con diferentes herramientas,
basadas en preguntas, test y conversaciones.
En primer lugar hay que desaprender lo que nos
lleva a cometer siempre los mismos errores, luego comienza el cambio y el
reaprendizaje hasta llegar a la institucionalización de ese cambio.
Todo el proceso es un acompañamiento, un
intercambio entre iguales, en las que el Coach no ordena para ser obedecido,
sino que facilita los pasos que llevan a recorrer el camino.
Los objetivos se acuerdan. Los logros han de
ser medibles y razonables.